Volvemos de vacaciones, de este espacio que nos damos para escucharnos, conocer mejor nuestra verdad, nuestra esencia; un espacio para soltar lo que ya no necesitamos y no es nuestro.
Regresamos renovados, mas en paz, más vacíos y esto no se debe a una época del año determinada, no se debe a una playa preciosa, al mar, o a la montaña, a dormir mas o menos, a unas relaciones determinadas, no. Esta paz no tiene nada que ver con las circunstancias externas, sino con una decisión profunda de elegir de nuevo, de elegir la verdad, de comprometernos internamente con la verdad. Parece que sí, parece que solo podemos encontrar esta paz renovadora cuando las circunstancias son las apropiadas, pero esto es solo un regalo que nos damos de amabilidad, otra oportunidad en la forma que nos ponemos para soltar lo que no es real: el control, el miedo, la exigencia, el perfeccionismo, ….el tiempo.
Así que volvemos, regresamos a unas rutinas, al trabajo, a unas relaciones determinadas, a los que-haceres….y vuelven a activarse patrones viejos y creencias de que somos los responsables de algo en la forma, vuelven a aparecer las ideas limitadas de que hay algo a lo que estoy obligado, los “tengo que” y los “debo de”. Vuelve lentamente, y como una gran tentación el ponerse la mascara de “hacedor” y la falsa autoimagen de un personaje que consigue y que el depende que las cosas vayan bien. Es decir que nos volvemos a creer que sin tu “hacer” todo sería un caos……
Pues bien este escenario, no es un castigo, no es un error, sino otra gran oportunidad para volver a pararte, darte al silencio, una y otra vez, vaciarte, volver a respirar, dejarte en manos de la paz y confiar. Escucha todo lo que ya conoces, esa propuesta del ego muy antigua y caduca que vuelve a reaparecer. Solo pide tu atención, tu mirada, tu permiso sin necesidad de que te lo creas. Solo es una nueva y maravillosa oportunidad para perdonar y elegir de nuevo, esta vez desde la mirada del Amor. Elije de nuevo en favor de la verdad, donde tu Paz está por encima de todo.
MLBC💜
